A guest post from Yanira Wandera an Oakland educator and Director of Community Leadership at GO Public Schools
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My husband and I have 3 wonderful Blacktino elementary school aged children in Oakland public schools. During this past season, while our kids were making their holiday wish list (Spiderman web-shooter, tie dye kit, skateboarding gear), my husband and I joined other families in Oakland to make our school wish lists for our children (open enrollment closes on February 7, 2020).
In the same way we think about raising our children holistically, we think about our school options holistically. As first-generation college students ourselves, we are acutely aware of the systematic barriers to college access and completion. Both my husband and I were required to take remedial classes. Our schools did not adequately prepare us. This must stop. The SBAC is the best indicator we have to know if a school is preparing students like my kids to enter college without needing to take remedial classes.
My family also has the means to own a home in the Fruitvale because our families instilled in us the value of education and because of outreach programs and family who walked side by side with us on our first-generation college journey. We expect our kids to continue to build on our family’s foundation. With this in mind, we are still facing a quality desert and still struggle with too few options for our kids. We are unfairly forced to ask many pointed and often painful questions as we create our school wish lists.
- Where will our kids feel a strong sense of racial identity and belonging?
- How are black and brown students supported to be at grade level compared to other students? Is there a gap? How big is the gap?
- Is there evidence of growth for black and brown students towards grade level within this school? How does this growth compare to other racial groups at the same school?
Because my husband and I are also educators, we have spent many nights this season, when the kids are finally asleep, sitting in the dark creating our own spreadsheets to answer these questions. This research is privileged information that ALL families, especially those most failed by our system, should have as they not only explore their wish list, but also as they join advocacy efforts to make all family’s wish lists a reality.Share this email with a friend!
¿Qué tan bien están apoyando las escuelas de Oakland a los estudiantes afroamericanos y latinos / a de bajos ingresos?
Mi esposo y yo tenemos 3 niños maravillosos blacktinos de edad primarias en escuelas públicas de Oakland. Durante la temporada reciente, mientras nuestros hijos hacian su lista de deseos Navideños (guantes tiradores de Spiderman, kit de tinte, patineta), mi esposo y yo nos unimos a otras familias en Oakland para hacer nuestras listas de deseos escolares para nuestros hijos (las solicitudes escolares se cierran el 7 de febrero del 2020 para el proximo año escolar).
Del mismo modo que pensamos en criar a nuestros hijos de manera holísticamente pensamos en nuestras opciones escolares considerando varios factores. Como estudiantes universitarios de primera generación, estamos conscientes de las barreras sistemáticas que existen para poder tener acceso y completar la carrera universitaria. Tanto mi esposo como yo estuvimos obligados a tomar clases de recuperación durante nuestra carrera. Nuestras escuelas no nos prepararon adecuadamente. Esto debe parar. El SBAC es el mejor indicador que tenemos para saber si una escuela está preparando a estudiantes como mis hijos para ingresar a la universidad sin necesidad de tomar clases de recuperación.
Mi familia también tiene los medios para tener una casa en la Fruitvale ya que nuestras familias nos inculcaron el valor de la educación y por el apoyo de programas comunitarios que caminaron con nosotros mano a mano en nuestro primer viaje universitario como primera generación. Esperamos que nuestros hijos continúen construyendo más allá la fundación de nuestra familia. Con esto en mente, todavía nos enfrentamos a un desierto de calidad y todavía luchamos con muy pocas opciones para nuestros hijos. Nos vemos injustamente obligados a hacer muchas preguntas que a menudo son dolorosas al crear nuestras listas de deseos escolares.
- ¿Dónde sentirán nuestros hijos un fuerte sentido de identidad racial y pertenencia?
- ¿Cómo están apoyando a los estudiantes afroamericanos y latinos para estar a nivel de grado en comparación con otros estudiantes? ¿Hay una brecha? ¿Qué tan grande es la brecha?
- ¿Hay evidencia de crecimiento para los estudiantes afroamericanos y latinos hacia el nivel de grado dentro de esta escuela? ¿Cómo es este crecimiento compara con otros grupos raciales en la misma escuela?
Debido a que mi esposo y yo también somos educadores, hemos pasado muchas noches esta temporada, cuando los niños finalmente están dormidos, sentados en la oscuridad de nuestra recamara creando nuestras propias hojas de cálculo para responder estas preguntas. Esta investigación es información privilegiada que TODAS las familias, especialmente las más fallidas por nuestro sistema, deberían tener, para no sólo explorar sus deseos, sino también para que se unan a los esfuerzos de abogacía para hacer realidad todas las listas de deseos de las familias en nuestra comunidad.
